Sobre los valores socialmente positivos del Steampunk como fenómeno y subcultura.
En el año 2000, los submarinos serían impulsados por una ballena y los bomberos apagarían fuegos desde el aire dotados de unas alas mecánicas. Son sólo dos vaticinios que el dibujante Jean Marc Coté fabulo en 1898 en una serie de estampas tituladas “En el año 2000”. El apego que experimentamos hoy por estas imagenes candorosas y optimistas del pasado es la sustancia de lo que llamamos Retrofuturismo. Una de sus vertientes específicas – el Steampunk – está viviendo hoy un auge… Clicka para leer más.
Publicado en el Cultura/s de La Vanguardia | 30 ene. 2013
Imagen: Sara Hunter y su corsé steampunk